lunes, 31 de diciembre de 2012

HUYE DE UNA NINFÓMANA DESPUÉS DE 36 HORAS DE SEXO


La policía encontró en el día de ayer a un hombre llorando en la calle tras 36 horas de sexo salvaje con una ninfómana insaciable. Lo que para la comunidad internetera se considerraría un paraíso, para este hombre fue un auténtico infierno. La conoció en un autobús y la cosa, según se ha podido investigar fue más o menos así:

- “Hola, chato, qué, ¿viajando en bus?”
- “Emm, hola, pues sí”
- “¿Y si fornicamos en mi casa como conejos en celo hasta que salga el Sol mañana por la mañana?”
- “Coño, qué directa, ¿no? Suena bien”

Quién le iba a decir que lo de “hasta que salga el Sol” iba a ser literal. Aunque ella más bien quería decir “hasta que al Sol se le termine el helio y empiece a transformarse en Gigante Roja” porque era ninfómana, pero también sabía mucho de cosmología.

Cuando llegaron al depar de la chica empezó la faena y la depravación. Al principio todo iba bien, pero…

- “Quiero otro polvo”
- “¡Estamos por el tercero! ¡Déjame descansar! ¡Se me está poniendo como una pasa!”
- “¡Mi fruto seco favorito! ¡Vamos allá! Groararrrr”

Él no sabía que la mujer había cerrado con llave y no podía salir de ahí. Al cabo de un rato el hombre ya estaba exhausto y ella no podía parar. 

- “¡¡Me duele el pirulín!! ¡¡No puedo más!!”
- “¡Pues te pongo vicks vaporub! ¡Arriba, abajo, arriba, abajo! Grrooaaar”
- “¿Y si paramos a comer?”
- “¡Yo sí que sé lo que me voy a comerrrr! Grorraaarrrrrrr”

Nada valía para contener a la insaciable mujer de 47 años. Así fue la cosa durante 36 largas horas en las que el hombre empezó a tener calambres fálicos. Por suerte para el hombre, ella se quedó dormida y pudo escaparse a la calle a duras penas, a donde fue a llorar desconsolado por su cautiverio sexual. El hombre ni tan siquiera podía andar y se sentó angustiado en la calle hasta que lo encontró la policía.

La mujer ha sido detenida por asalto sexual a cuca armada y no es la primera vez. Unas semanas antes ya fue detenida por dejar exhausto a otro hombre que tuvo que pedir auxilio desde la terraza de un edificio. Finalmente, la ninfómana ha sido ingresada en un psiquiátrico donde recibirá una terapia de shock con asientos vibradores las 24 horas para intentar curarla.

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